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Un hombre de 48 años fue asesinado a golpes por una patota que lo agredió tras una discusión en el playón de una estación de servicio en José C. Paz.

El hecho ocurrió en horas de la madrugada del lunes en el cruce de la avenida Hipólito Yrigoyen y la calle Julián Martell cuando aparentemente un grupo de unos 20 jóvenes agredió a otro grupo de cuatro luego de una discusión de tránsito.

Los voceros del departamento judicial de San Martín revelaron al diario Crónica que un hombre identificado como Adrián Ramón Bustamante, de 48 años, resultó mortalmente herido en el lugar.

Tras constatar las cámaras de seguridad de la estación de servicio, se pudo determinar que el hombre fue atacado a golpes por un grupo de personas que luego escaparon del lugar.

En las imágenes se puede observar como Bustamante, que al parecer conocía a una de las personas implicadas en la discusión, comienza a pelear con un hombre y luego es brutalmente atacado por varias personas que lo golpean e incluso le arrojan objetos.

En la escena se ven a más de 10 personas que reparten golpes, pero un grupo de ellos ataca ferozmente a la víctima que es alcanzada por una piedra y luego recibe patadas en la cabeza.

El testimonio de amigo de la víctima

Diego, un amigo de Bustamente que se encontraba en el momento de la agresión, contó como fue la situación: “Nos juntamos a celebrar el cumpleaños de un amigo. Una moto con dos personas a bordo roza a mi hermano y comienzan a intercambiar palabras”.

“Mi amigo ve que hay una discusión con mi hermano y se acerca para defenderlo porque pensó que le iban a pegar”, contó y añadió que luego de eso empezaron a discutir.

“En un momento los de la moto les gritan a unas personas que estaban en el kiosco de la otra cuadra y cruza una manada. Eran como 15 o 20 y comienzan a atacar a todos los que se les cruzaban en el camino” señaló.

Diego sostuvo que “eran 20 asesinos” y se lamentó: “No me dieron tiempo a nada, eramos 4 contra 20 e hicimos lo que podíamos pero nunca lo abandonamos. Cuando nos dimos cuenta que nos superaban en cantidad comenzamos a dispersarnos. Ahí las chicas que estaban con nosotros nos dicen que había alguien tirado en al estación de servicio. No me había dado cuenta que era mi amigo”.