Una garrafa de gas con pérdida provocó la explosión y derrumbe de una vivienda en Los Polvorines, con seis personas internadas, en su mayoría niños: una de ellos con el 80% del cuerpo quemado, el padre el 63% y dos niños tienen el rostro con graves quemaduras.
Una garrafa explotó en un hogar de la localidad bonaerense de Los Polvorines, lo que provocó que se derrumbara la estructura. En consecuencia, el papá y sus cinco hijos permanecen internados por las graves quemaduras que sufrieron.
El hecho ocurrió en la tarde del lunes 24 de octubre en la casa ubicada en Bacacay al 100, cuando uno de los menores prendió la luz de una habitación que, se cree, estaba cargada de gas. En ese sentido, una de las hipótesis es que una de las mascotas habría mordido una manguera de la garrafa de gas.
El padre, al llegar a su casa al mediodía, sintió un fuerte olor a gas, por lo que intentó cerrar la garrafa. Sin embargo, no fue suficiente, ya que el ambiente se encontraba inundado de gas y explotó al iniciarse el circuito eléctrico, de acuerdo con el relato del tío de la familia a Telenueve.
La explosión se escuchó en una distancia de tres cuadras y derrumbó por completo toda la estructura de la casa. Así, seis personas resultaron heridas: el padre y los cinco hijos de entre 4 y 12 años.
Según se pudo conocer, la familia había perdido sus ingresos, por lo que no pudo pagar la factura de gas, razón por la cual se le cortó el suministro; por esto mismo, había instalado una garrafa tipo tubo de 45 kilos.
Actualmente, tres de los menores se encuentran internados en el Instituto del Quemado, otros dos en el Hospital Garrahan, mientras que el padre permanece internado en el Hospital de Trauma Federico Abete, de Malvinas Argentinas.
El padre tiene un 63% del cuerpo quemado, la niña de 10 años tiene un 80% de su cuerpo quemado y los varones Bastian e Ian estaban “irreconocibles” por las heridas que sufrieron en sus rostros. Según el relato del tío, a los niños les quedó el guardapolvo pegado a la piel.
La casa quedó totalmente destruida. La madre se encontraba trabajando, por lo que no estaba en el hogar al momento del hecho y es la única de la familia que se salvó de la explosión.
