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Un joven de 22 años fue asesinado de un balazo en el abdomen en una vivienda de la localidad bonaerense de Garín, y por el crimen quedó detenido otro de 24 años que se presentó en la comisaría para decir que había sido víctima de un robo, pero tras una serie de contradicciones terminó admitiendo la autoría de los disparos, informaron hoy fuentes policiales.

La víctima fue identificada por la policía como Ariel García (22), y el ahora detenido como Esteban Nicolás Gudiño (24).

Todo comenzó ayer alrededor de las 7, cuando personal de la comisaría 3ra.de Garín se hizo presente en la calle Jujuy al 600, entre las calles Padre Perna y Roma de la mencionada localidad del partido de Escobar, por la presencia en el lugar de una persona herida por el disparo de un arma de fuego.

Según los voceros, el herido, García, fue trasladado de urgencia a una Unidad de Primeros Auxilios de Garín, donde finalmente murió a raíz de las heridas que presentaba.

La primera intervención judicial estuvo a cargo del fiscal Nicolás Defagot, de la Ayudantía Fiscal de Garín, y tras una serie de diligencias investigativas y declaraciones testimoniales, se estableció que aparentemente Gudiño había concurrido al domicilio de la víctima a bordo de una moto que dejó abandonada en el lugar y, tras efectuar varios disparos al aire, agredió de un disparo a García.

Por su parte, los voceros informaron que Gudiño se presentó horas después del hecho en la comisaría local y ofreció otra versión de los hechos, donde afirmaba que había sido víctima de un robo y que lo habían golpeado.

Sin embargo, un jefe policial contó a Télam que "estando en la comisaría, el joven incurrió en una serie de inconsistencias y contradicciones y terminó admitiendo que él había efectuado los disparos".

Si bien esa autoincrirminación en la comisaría no tiene valor legal porque no fue realizada en una indagatoria, la fiscalía dispuso que el sospechoso quedara aprehendido por el homicidio.

Los efectivos policiales también incautaron una campera de Gudiño que tenía manchas de sangre.

La causa quedó a cargo la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 5 de Escobar y fue caratulada como "homicidio".