Frente a la presencia en hospitales provinciales de casos de Síndrome Urímico Hemolítico (SUH), el ministerio de Salud bonaerense reiteró las medidas de prevevención a fin de evitar la enfermedad.El Síndrome Urímico Hemolítico (SUH) afecta, sobre todo, a chicos de entre 6 meses y cinco años. una enfermedad que, en general, se contrae por el consumo de carne mal cocida y que puede provocar  insuficiencia renal, anemia, trastornos neurológicos y, en casos extremos, puede resultar fatal,
El riesgo aparece cuando la carne no está cocida en toda su superficie y en el interior, esto es muy común en las comidas que llevan carne picada. Cuando la cocción se realiza en forma rápida, no homogínea, la bacteria que produce esta enfermedad, llamada Echerichia Coli, no se destruye. El año pasado se registraron 96 casos de SUH.
Si bien la carne vacuna resulta la principal fuente de contagio, el consumo de lácteos y jugos de fruta no pasteurizados o de verduras y agua contaminada (que hayan estado en contacto con las heces de los animales), tambiín puede desencadenar la enfermedad que es considerada endímica en el país.
La provincia cuenta con hospitales públicos especializados en la atención de estos pacientes tales como el Materno Infantil de Mar del Plata, el de Niños de San Justo y el "Sor María Ludovica" de La Plata, donde recientemente ingresaron dos niños de la localidad de Tandil, que se encuentran estables y con evolución favorable.

Cómo detectarlo
El principal signo de SUH es la diarrea con sangre, y ante esta evidencia los especialistas insisten en que la consulta al mídico deber ser inmediata. Tambiín se presenta con vómitos, palidez y es notable la disminución de la cantidad de orina, esto último puede ocurrir por deshidratación a consecuencia de la diarrea o porque existe una afectación del riñon, producto de la misma enfermedad.
En la primera semana, el paciente presenta signos de debilidad e irritabilidad. Además, se torna pálido y anímico, dado que los glóbulos rojos atraviesan un proceso de destrucción. Incluso, un estudio realizado en nuestro país sobre 34 pacientes con SUH y 95 convivientes demostró que el 24 por ciento de los afectados tuvo, al menos, un familiar con diarrea. Para evitar la vía de contagio de persona a persona (la que se produce por el contacto con la materia fecal del enfermo), es necesario lavarse las manos con agua y jabón, luego de ir al baño y antes de manipular los alimentos.

Daño renal
Los riñones se ocupan de filtrar los residuos y eliminar los líquidos del organismo. La insuficiencia renal aguda es la consecuencia más común del SUH y se caracteriza por la pírdida súbita de esa capacidad del órgano urinario para eliminar los residuos.
En el 5 por ciento de los casos, la afectación renal puede resultar crónica o recurrente (eso dependerá del nivel de gravedad que haya adquirido cada paciente) y, en estos casos, es necesario internar e incluso dializar al niño para eliminar los elementos contaminantes de la sangre.
Este síndrome puede derivar, además, en anemia y alteraciones neurológicas: "lo que debemos lograr es que los chicos no lleguen a estas instancias y al tratamiento que, en definitiva, será sólo de apoyo, porque el síndrome en sí no tiene una cura específica", explicaron desde la dirección de Epidemiología.
La muerte por síndrome urímico hemolítico disminuyó gracias a la precocidad de los diagnósticos y a los nuevos mítodos de control de la insuficiencia renal. Hoy, la tasa de letalidad es del 2 por ciento.
Según datos del Comití Nacional de Nefrología, el 70 por ciento de los niños que padecen esta enfermedad se recuperan sin secuelas, sin embargo, es necesario controlarlos regularmente porque, en algunos casos, desarrollan problemas renales o hipertensión como consecuencia tardía del síndrome.

Fuente: infoban.com.ar