En consonancia con la intención de la Ciudad de Buenos Aires de permitir el regreso a las aulas, varios intendentes de Cambiemos salieron a mostrar de qué manera se podría posibilitar que al menos los más próximos a egresar puedan mantener contacto con sus pares antes de fin de año.
Sin embargo a los protocolos, medidas y controles a realizar en cada una de las comunidades educativas que propusieron, les sumaros el paraguas abierto y no como medida sanitaria, sino como lógica cobertura política a sabiendas que la negativa nacional a la Ciudad hacía cantada la oposición de la provincia a la apertura escolar en los distritos.
