Un hombre y una mujer con antecedentes por diversos delitos fueron detenidos acusados de liderar una organización delictiva que se ocupaba de realizar salideras bancarias y en casas de cambio bajo la modalidad de "motochorros" en el ámbito de la Ciudad y el Gran Buenos Aires.
Las detenciones de los acusados, identificados como Miguel Ángel Miño (42) y María Felisa Pereyra (61), se realizaron tras allanamientos a dos viviendas de la localidad de Paso del Rey, partido de Moreno.
Según indicaron las fuentes, ambos están acusados de liderar una organización delictiva que operaba bajo la modalidad "motochorros" para cometer entraderas en bancos y financieras de la Ciudad y la provincia de Buenos Aires.
La investigación por la cual fueron detenidos comenzó en febrero de 2021 cuando una persona retiró 40 mil dólares y 500 mil pesos de una casa de cambio ubicada sobre la calle Paraguay al 600, en el barrio porteño de Retiro.
Al retirarse del lugar, la víctima se dirigió en su vehículo hasta un centro comercial ubicado en la avenida Bullrich y Cerviño, en Palermo, donde fue sorprendido por dos "motochorros" que lo amenazaron con un arma de fuego y se dieron a la fuga tras el robo del dinero.
El Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 4, a cargo del juez Martín Yadarola, caratuló al expediente como "robo calificado por el uso de arma de fuego bajo la modalidad de salideras bancarias" y dispuso que la División Investigaciones Comunales 14 sea la encargada de la investigación.
A partir de una serie de análisis de redes sociales y de trabajo en la calle, los pesquisas recabaron datos que llevaron a identificar a los sospechosos.
Una vez identificados, la Justicia autorizó la intervención de las líneas telefónicas, lo que produjo que se confirmara su autoría y la participación de otros hechos bajo las modalidades "motochorros" y salideras bancarias, tanto en la Ciudad como en el Gran Buenos Aires.
Tras las órdenes de allanamientos, en los domicilios señalados por la Justicia se detuvo a los dos sospechosos y se incautó, entre otros elementos de interés para la investigación, un ticket con la inscripción "40.000 dólares", que coincide con los utilizados en las denominadas "cuevas", como de la que salió la víctima.
También se secuestraron documentación, cuatro celulares, ocho juegos de llaves de viviendas, una moto y un automóvil, una billetera con 2 dólares y 26.340 pesos en su interior, 2 pendrives, un chip de celular, dos cédulas de identificación automotor, una computadora, dos cuchillos, una riñonera, un morral negro, cuatro televisores, dos equipos de música, un DVR, una cadena y dos anillos de oro, un automóvil Peugeot 2008 color blanco, una camioneta Peugeot Partner negra, un Renault Megane azul, una moto Zanella, una moto Duke y una Honda Twister.
Con respecto a los imputados, las fuentes indicaron que el hombre cumplió una condena de seis años por el delito de "robo en poblado y en banda con uso de arma de fuego y asociación ilícita" en 2011, mientras que la mujer, quien también había sido imputada por el mismo delito, no había cumplido condena.
En esta oportunidad, ambos delincuentes ya fueron procesados con prisión preventiva y las investigaciones continúan para dar con otro integrante de la organización.
