El Índice de Precios al Consumidor (IPC-Costo de Vida) subió 8,4% en abril, impulsado por los rubros Alimentos y Bebidas, junto con Indumentaria y Calzado, informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec)

De esta manera, la inflación minorista alcanzó al 32% en el primer cuatrimestre del año y al 108,8% en los últimos 12 meses.

Los rubros con mayor aumento durante el mes fueron Prendas de vestir y calzado, con el 10,8% explicado “por cambios de temporada”, detalló el Indec, junto con Alimentos y bebidas no alcohólicas, con el 10,1% de suba, “por los incrementos en Verduras, tubérculos y legumbres; Leche, productos lácteos y huevos; Azúcar, dulces, chocolates, golosinas”, entre otros.

También se destacaron las subas del 9,9% en Restaurantes y hoteles, 8,6% para Equipamiento y mantenimiento del hogar.

El aumento del 10,1% en Alimentos y bebidas “fue el que más incidió en todas las regiones”, explicó el organismo estadístico

Las dos divisiones de menor variación en abril fueron Educación, con el 5%; y Bebidas alcohólicas y tabaco 3,8%.

A nivel de las categorías, Estacionales lideró el aumento con el 12,6%; seguida por el IPC Núcleo, con el 8,4%; en tanto que los Regulados registraron un incremento de 4,9%.

Luego de conocer los datos de inflación, El Secretario de Política Económica, Gabriel Rubinstein, comentó: “Abril volvió a presentar un dato de inflación sumamente elevado. Como aspectos particulares, cabe mencionar aumentos en bienes estacionales, como verduras (20,5%) e indumentaria (10,8%), ambos componentes que ya habían traccionado los precios en el mes anterior. Si bien algunos componentes del IPC Núcleo mostraron una importante desaceleración respecto de los elevados niveles de marzo, tal como la carne vacuna (2,7%), otros componentes mantienen dinámicas aceleradas, como la carne aviar (26,4%), lácteos (11,1%), azúcar (10,6%) y pan y cereales (8,5%). Percibimos también que la intranquilidad cambiaria en los mercados del dólar financiero, en la última parte del mes, impulsó subas de precios preventivas en muchos productos y servicios de nuestra economía. Esto requerirá redoblar esfuerzos desde la macroeconomía, para poder concretar políticas que permitan mejorar las cuentas fiscales, la acumulación de reservas y la estabilidad cambiaria, como así también robustecer la política de ingresos, todo ello a fin de lograr mejores resultados en la lucha contra la inflación".