La querella del juicio al sacerdote Julio Grassi denunciará a uno de los testigos por falso testimonio a raíz de la declaración el lunes, en la que negó haber dormido en la habitación del cura como, según dijeron, había dicho en 2006.
El abogado Juan Pablo Gallego, que representa al Comití Argentino de Seguimiento de la Convención Internacional de los Derechos del Niño (CASACIDN), dijo hoy que denunciará "por falso testimonio al testigo Flavio Móndolo, ya que cambió punto por punto la declaración que dio por escrito" hace dos años.
Móndolo, un joven que ingresó a la Fundación Felices los Niños en el año 1994, fue interrogado ayer por la defensa, la fiscalía y la querella acerca de su relación con el sacerdote, de quien dicen era uno de sus preferidos.
El testigo negó haber dormido en el cuarto de Grassi y atender desde allí el telífono y afirmó que dormía "en una habitación contigua porque había trabado amistad con Fabián Amarilla", otro de los internos a quien tambiín se sindica como favorito del cura.
Móndolo no negó, en cambio, que Grassi lo llevaba a eventos sociales -como casamientos de famosos-, a la radio en la que participaba el acusado y que realizó con íl tres viajes a la localidad santacruceña de El Calafate, junto con otros chicos de la Fundación.
Según Gallego, el testigo había admitido en su declaración del 10 de noviembre de 2006 que dormía solo en la antesala del cuarto de Grassi, despuís de haber compartido, en un primer momento, ese espacio con otro joven de la fundación.
"El testigo desmintió íste y otros tantos puntos de la declaración que había hecho en 2006, y además mencionó a Lucía Portal, esposa del conductor televisivo, y a una catequista, las que presuntamente colaboraron en el encubrimiento del religioso", explicó Gallego.
El abogado pedirá al tribunal que investigue la participación de estas dos allegadas a Grassi en hechos "tendientes a desprestigiar a los jóvenes que denunciaron los abusos".
"Para nada durmió conmigo, ni nada por el estilo. Todos los chicos de la Casa del Adolescente vivían al lado mío", afirmó hoy Grassi refiriíndose a Móndolo. Tambiín dijo que entre los chicos "no había preferidos, todos tenían las mismas posibilidades".
"En realidad el trato siempre es diferente porque cada uno de ellos es distinto", sostuvo hoy antes de ingresar a los tribunales de Morón, donde se sustancia el juicio.
El cura explicó que "algunos se interesaban más por unas tareas que por otras", en relación a los jóvenes que lo acompañaban a los medios de comunicación, entre otras actividades.
El abogado defensor, Daniel Cavo, dijo que Móndolo dormía ocasionalmente en un cuarto cercano a la habitación de Grassi, acompañado por otro joven.
"Es falso que Móndolo dormía con Grassi y jamás ningún chico atendió ningún llamado ni ninguna otra cosa en la habitación del cura", aseveró el defensor del cura.
Pero Gallego destacó que Móndolo contradijo incluso el testimonio de otros testigos, como el del ex policía Juan Pírez, que afirmaron que durmió en la misma habitación de Grassi.
Otro de los testigos, Guillermo Verdún, un preceptor del hogar, había declarado la semana pasada que vio una escena de caricias por el ojo de la cerradura de la puerta de esa misma habitación.
Antes de ingresar al edificio donde se juzga al cura, Gallego pidió una copia del audio del testimonio de Móndolo para presentar una denuncia por falso testimonio contra este testigo, considerado uno de los más cercanos del religioso.
En el juicio a Grassi, acusado de 17 hechos de abuso sexual y corrupción de menores, la mayor parte de esta jornada la ocupó una disputa entre la defensa y la querella en torno a una pericia caligráfica a una carta atribuida a Gabriel, uno de los dos denunciantes.
La querella solicita que el cuerpo de escritura obtenido sea cotejado con otros documentos y no sólo con esa misiva, en la que el joven afirma que decidió escaparse de la Fundación debido a que no se llevaba bien con sus compañeros.
La querella asegura que la huída de Gabriel tiene que ver con la situación de abuso a la que fue sometido, afirmación ratificada por el propio denunciante en su declaración.
Como Gabriel no reconoció como suya esa carta, la defensa de Grassi pidió un peritaje caligráfico que ese efectuó el 27 de octubre pasado.
Mañana se espera la declaración de Fabian Amarilla, otro testigo importante, amigo de Móndolo y sindicado por la querella como uno de los "secretarios privados" del cura, junto con Patricia Castillo y María Laura Casal, dos empleadas de la Fundación.

Fuente: infoban.com.ar