El socio del presidente del Club Municipal de Vicente López (VILO) Marcelo Longhi, asesinado el 13 de enero último en la ciudad de Luján, declaró ante la justicia en indagatoria a través de un escrito. La nueva versión que introduce Achard se contrapone con su primera declaración, cuando cargó sospechas sobre supuestos vendedores de ganado de la zona de Navarro con los cuales el ex rugbier tenía previsto reunirse, cuestión que fue rápidamente descartada.
Longhi fue hallado asesinado a golpes y con el cuello quebrado el 13 de enero pasado en la caja de su camioneta Ford Ranger detenida entre unos pastizales, a unos 15 metros de un camino rural que se cruza con la ruta provincial 47, en el acceso al paraje La Choza, en el límite entre Luján y General Las Heras.
Ahora, su socio y amigo con el cual arrendaban un campo en la localidad de Tomas Jofre, al ser indagado por la justicia casi dos meses después de ser detenido, apuntó al también detenido encargado del campo, Ramón Flores.
En una versión que se contrapone con las pruebas reunidas en la causa, sostuvo que fue Flores quien asesinó a Longhi de un disparo en la cabeza (que no fue detectado en la autopsia) y que fue amenazado por el casero del campo.
En la declaración a la que accedió InfoBAE, Achard indicó que luego de una reunión en San Isidro se dirigió al campo que explotaba con Longhi y que allí lo recibió el encargado: “me abrió la tranquera y luego subió a mi vehículo para acompañarme hasta la casa. Al dejar el auto, observé que la camioneta de Marcelo estaba estacionada cerca del bebedero de los animales. En ese momento, Flores se bajó, extrajo un arma de fuego de puño tipo 9mm que tenía en su cintura y, antes de que yo pudiera decir algo, comenzó a decirme: ‘Se me fue la mano…se me fue la mano’”.
En su relato Achard sostuvo que Flores le confesó que “había discutido con Longhi porque se había enterado que tuvo intenciones de mantener relaciones sexuales con su pareja, o que las había tenido. A ella yo la conocía bien, ya que se quedó viviendo en el campo dos semanas con Flores”. Tanto la mujer como la supuesta relación no habían sido mencionadas previamente en el expediente.
Achard dijo también a la justicia que el casero lo apuntaba con el arma y que lo obligó a ayudarlo a cargar el cuerpo de la víctima en la camioneta amenazándolo de muerte, y amenazando con matar también a su mujer y su hija. “En el camino de vuelta Flores me contó que lo había matado a esa mañana mediante un disparo de arma de fuego en la nuca. No me dijo que arma había utilizado, pero me imagino que fue la que llevaba consigo y con la cual me amenazaba. Quiero aclara que desconozco cuál fue la modalidad, pero hago referencia a lo que él me dijo” manifestó.
Achard participó del velorio de Longhi, pero ante la justicia no explicó por qué no le dijo a los familiares ni a la policía lo que según su versión ocurrió. Días más tarde del asesinato del ex rugbier fue detenido: en su domicilio de Vicente López secuestraron una pistola calibre 9 milímetros con la documentación vencida, y también se allanó una oficina donde Achard tiene su empresa de seguridad, a pesar de lo cual sostuvo: “Tenía miedo por mi vida y la de mi familia”.
En esa misma línea al ser indagado justificó: “Marcelo estaba muerto, ya no podía modificar nada. Ante esta realidad, y con temor a que Flores me hiciera lo mismo, decidí llevarlo a Chaco porque de ese modo podía recuperar el campo tanto para la familia de Marcelo como para la mía. Pero temía que si lo hacía sólo quisiera deshacerse de mí, por eso le pedí a mi mujer y mi hija que me acompañaran”.
En las próximas horas el encargado del campo, Ramón Flores, podría enviar también un escrito mientras ambos continúan detenidos acusados por homicidio simple. En una entrevista antes de ser detenido en Chaco, también deslindó su responsabilidad e introdujo supuestas infidelidades de su jefe, que dijo "mantenía una relación con la esposa de un comisario, de un abogado y con una chica del club".
Una de las pruebas más contundentes para imputar a Achard y Flores consistió en que el horario del deceso de Marcelo Longhi no fue más allá de las 13 horas, por lo cual para la fiscal Mariana Suárez la muerte del ex rugbier se produjo en el campo de Tomás Jofré, pero Achard dijo que lo vio salir de allí a las 13:35.
También entre las ropas de Longhi se encontraron hojas de eucalipto que no había en la zona donde se encontró la camioneta con el cuerpo de la víctima, pero que son abundantes en el campo donde para la justicia se produjo el asesinato.
