El presidente de la Conferencia Episcopal Argentina y obispo de San Isidro, monseñor Oscar Ojea, se manifestó "profundamente conmovido" por la muerte de hasta el momento 20 personas que consumieron cocaína adulterada en varias localidades del la zona oeste del conurbano bonaerense, y advirtió sobre "el grave problema de las adicciones" en el país.
"Estoy profundamente conmovido por la muerte de jóvenes y adultos por el consumo de droga adulterada. Rezamos a Dios por cada uno de ellos, especialmente por sus familias y por toda la comunidad que sufre. Rezamos también por quienes están internados en grave estado", señaló Ojea en un mensaje publicado en su cuenta oficial de la red social Twitter.
En ese marco, agregó: "Ver el modo como han fallecido estas personas nos cuestiona profundamente como se esta viviendo el grave problema de las adicciones".
Según el último reporte del Ministerio de Salud bonaerense, son 20 las personas fallecidas por la aparente ingesta de cocaína envenenada y 49 las que continuaban hoy internadas por la misma causa en hospitales del conurbano, mientras que las consultas realizadas esta madrugada fueron en su mayoría de casos leves.
