Cuando todavía los elogios de Nístor en la inauguración endulzaban los oídos de Don Ernesto, el otrora poderoso secretario de Gobierno de Ubieto aceptaba la muda sugerencia de su par de San Fernando de retribuir los elogios que tanto lo ayudaran en la contienda con el entonces “Pibe de Oro”, poniíndole el nombre del santacruceño al túnel de Carupá.
Parece que en un rapto de amnesia su hijo –hoy concejal- olvidó repasar los cuadernos de la historia local cercana y junto al siempre coprotagonista en el Deliberante presentaron un proyecto para sacarle el nombre al túnel y le dejaron servida la jugada de la unidad al intendente.

Fuente: infoban.com.ar