El gobernador Axel Kicillof mantuvo una reunión con intendentes del Gran Buenos Aires que le manifestaron “el marcado crecimiento en la demanda de comida y de trabajo” en los municipios, registrado después de “la devaluación y la desregulación” que aplicó el Gobierno nacional.

La reunión tuvo lugar en la Gobernación bonaerense y contó con la participación de los intendentes de La Plata, Julio Alak; de Avellaneda, Jorge Ferraresi; de Ensenada, Mario Secco; de Merlo, Gustavo Menéndez; de Almirante Brown, Mariano Cascallares; de Hurlingham, Damián Selci; de Escobar, Ariel Sujarchuk; y a las intendentas Mayra Mendoza, de Quilmes; y Mariel Fernández, de Moreno.

El Gobierno bonaerense detalló en un comunicado que Kicillof convocó a la reunión para “analizar la situación que está atravesando la provincia y el país desde la asunción del Gobierno del (presidente) Javier Milei”.

“Los intendentes informaron sobre el marcado crecimiento en la demanda de comida y de trabajo en los municipios”, se indicó y en cuanto a los recursos, se observó, que “se observa una reducción de aquellos que provienen de fuente nacional, a la vez que se dificulta la cobrabilidad de las tasas locales”.

Los mandatarios analizaron que esa situación se originó a partir de la “devaluación y la desregulación que se implementaron a partir del 10 de diciembre”, que tuvo como consecuencia “fuertes aumentos en los combustibles, alimentos, medicamentos y otros artículos de la canasta básica”.

Además, alertaron que los “sectores medios y vulnerables” fueron afectados “gravemente” por las medidas de la administración de La Libertad Avanza (LLA).