Uno nació en Mar del Plata, el otro en Colombia, pero vive en Luján. Los dos son prototípicos, uno es rubio, empresario, bien vestido y con mucho glamour, el otro morocho con buena llegada entre las capas populares. Uno se lleva muy bien con sus pares dueños de empresas, el otro con los que trabajan para ellos. Los dos tienen coches lujosos y campos con caballos de carrera, y pertenecen al mismo partido político, aunque en dos fracciones diferentes y enfrentadas.
El que se llama Hugo Moyano dijo del otro que es "un empresario fracasado", y que la interna "se la gano yo solo".
El que se llama Francisco De Narváez le respondió que "no representa a los trabajadores", y que "no se ocupa de los que están en negro".
"Tenemos un serio problema de cuatro millones y medio de trabajadores informales y no veo preocupación del sindicalismo de llevarlos a un trabajo formal, de darles las prestaciones que un Estado y una economía y un sindicalismo moderno le tienen que garantizar", señaló De Narváez. Y agregó: "Hay que discutir ideas porque no me gusta descalificar a las personas por quí apariencia tienen".
"El peronismo de verdad, el peronismo que viene, el peronismo que comienza una nueva ípoca tiene que tener en claro que los trabajadores son el eje de la construcción del justicialismo y no estar despreciando o calificando", añadió el "Colo".
El día anterior el dirigente gremial había dicho: "A De Narváez le gano yo la interna del peronismo, porque el peronismo no puede caer en manos de un empresario fracasado”. "es un empresario fracasado porque dejó de ser empresario y se dedicó a funcionar financieramente".
"Vamos a movilizar a los trabajadores cuando sea la interna del peronismo de la Provincia de Buenos Aires y vamos a apoyar al mejor candidato que represente los intereses del espacio fundamental del peronismo, que son los trabajadores, creo que sin castigar le ganamos".
Los dos son precandidatos a gobernar la provincia de Buenos Aires.
Fuente: infoban.com.ar
