Un abogado resultó herido a golpes y apuñalado en el hombro por dos hombres que ingresaron a robar a su estudio ubicado frente al Centro de Monitoreo del partido bonaerense de Morón, y los investigadores intentan determinar si los atacantes conocían a su víctima, a quien le reclamaban una deuda por la venta de terrenos, informaron hoy fuentes policiales.

Según los investigadores, el hecho ocurrió ayer en un edificio ubicado en Rivadavia y Viale, en ese partido del oeste del conurbano, y el abogado Rubén Emilio López, quien está a cargo del estudio y de una inmobiliaria que funciona en el lugar, aseguró que los delincuentes se apoderaron de 300 mil pesos, una computadora y el teléfono celular suyo y el de un empleado.

Los policías lograron determinar en base al relato de las víctimas que todo comenzó cuando dos hombres ingresaron a sus oficinas en las que se hallaba él y un empleado suyo de nombre Nicolás.

De acuerdo a su denuncia, además del trabajo de abogado, él se dedica a la venta de lotes, quintas y viviendas en la zona de Mariano Acosta, Agustín Ferrari, Derqui y Zárate, y los delincuentes comenzaron a reclamarle una suma de dinero que López les había prometido por haber sido intermediarios en una venta.

Ante esa situación, uno de los agresores atacó a golpes a López en la cabeza con un arma de fuego y luego le clavó un cuchillo en el hombro izquierdo, por lo que quedó herido tirado en el piso.

Los delincuentes ataron al abogado y a su empleado y comenzaron a revisar la oficia, tras lo cual huyeron con 300.000 pesos en efectivo que se hallaban guardados en un cajón, dos computadoras y los teléfonos celulares de ambas víctimas.

El abogado le dijo a la policía que antes que los delincuentes se fueran lo amenazaron diciéndole que regresarían a buscar otros 10.000 dólares que le debían, y que si denunciaba el caso iban a matar a toda su familia.

El letrado aportó los nombres y la fisonomía de los dos agresores, por lo que la policía salió en busca de ellos, aunque por el momento el resultado es negativo.

Por relevamiento de cámaras, los investigadores establecieron que los autores se movilizaban en un Ford Focus rojo, que aún tampoco fue localizado.

La causa quedó en manos de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 de Morón, a cargo del fiscal Oscar Marcos, quien caratuló el expediente como "robo agravado, amenazas y extorsión".