La casi segura partida del intendente de San Martín al gabinete de Alberto tiene algunos ribetes que Kato tiene que cuidar, como definir quienes lo acompañarán y a la vez mantener motivados a los que se quedan para mantener el foco de la gestión local y evitar cualquier desmadre político.
Además compartió actividad universitaria con su vecino sanisidrense Gustavo Posse, que tapó el agujero financiero de la provincia en el túnel de Sarratea, gesto que piensa recompensar desde su futuro destino ministerial.
Otro con el que mantiene buena relación es con Joaquín, que una vez que termine la gestión de Vidal pasará a ser un “sin tierra” y fue un asiduo visitante de su despacho, donde se lamentaba de la escasa cintura política de los funcionarios y dirigentes de Cambiemos.
Además tanto Gustavo como Jaime, el “pollo” sanmiguelino podrían convertirse en buenos aliados del futuro gobierno nacional.

Fuente: infoban.com.ar