Andrés Antonietti, referente de Juntos Por El Cambio en Pilar, se refirió a la “Causa Vialidad”, por la que el fiscal federal Diego Luciani pidió 12 años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos para Cristina Kirchner.
Al respecto comentó que “frente a la magnitud de la crisis económica y social que vivimos, combinada con la irresponsable violencia fogoneada por la vicepresidenta para defenderse de sus causas judiciales, vamos derecho al caos. Lo que viene es la fase demencial del relato kirchnerista. Quedó a la vista el plan de saqueo de recursos públicos que organizaron desde el aparato del Estado. A partir de ahora lo que podemos esperar son más mentiras y más locura. Con su “mística setentista revolucionaria” ahora viene el paso a la clandestinidad con voluntad antidemocrática”.
“El kirchnerismo jamás encaró una revolución en favor de los más humildes a los que empobrecieron. Mas de la mitad de los argentinos son pobres. Fueron 14 años de mentiras que pusieron al país en el podio de los más rezagados del mundo. Fue solo un relato.
Una experiencia discursiva donde no importan los datos. Llenándose la boca con lo “nacional y popular” siendo ellos mismos la “oligarquía” que dicen combatir. Muchachotes que viven en Recoleta, Barrio Norte y Puerto Madero”.
Antonietti remarcó que “El kirchnerismo nunca fue progresismo. Es un espacio político conservador. Un grupo de polifuncionarios y militantes rentados que defienden sus cargos y privilegios en el Estado. Viven como jeques, piensan como conservadores y se expresan como defensores de los pobres. Si fueran progresistas, hoy serian liberales como nosotros, que sentimos y sabemos que hay que demoler los privilegios de la burocracia estatal que vive del esfuerzo del sector privado”. Se equivocan, continuó, quienes analizan el accionar de Máximo Kirchner como dirigente político, “… es el pastor de una secta anti republicana y mafiosa, y se expresa en consecuencia. Sin respeto por la ley de la gravedad. A puro dogma”. Sobre el intendente de Pilar, Federico de Achaval, Antonietti critico su seguidismo al “defender por conveniencia u obediencia, junto con el peronismo local, la posición de la vicepresidenta”.
Sobre la causa judicial dijo que “hay una tonelada de pruebas en contra de exfuncionarios sostenidos por la vicepresidenta para el saqueo a imagen y semejanza de Santa Cruz. Llegaron al poder y desde el día cero continuaron las tropelías. Con Jaime, López, de Vido, Ulloa y demás forajidos”.
“Argentina fue víctima de un saqueo sistemático y la historia ya los juzgó. Ahora van a insistir con el relato de la resistencia, de la clandestinidad, de perseguidos por una justicia injusta. Ya está. Se termino el tiempo de la abogada exitosa que ejecutaba con su marido embargos a deudores morosos durante la dictadura. Ya no tiene margen para cuentos revolucionarios con los millones de pobres que nos dejaron. A la arquitecta egipcia le sobran hoteles y propiedades mientras a millones de argentinos apenas les alcanza para asomar la cabeza por encima del agua”.
