La organización independiente ambientalista de prestigio mundial entró de lleno al problema de los incendios en el Delta. A travís de una carta a sus socios la entidad ambientalista comienza a separar la paja del trigo antes de que tambiín les llegue el fuego, y culpan al gobierno de la provincia de Entre Ríos de otorgar, por medio de una ley votada en el 2004, más de 110.000 hectáreas de tierras fiscales en arrendamiento, de terrenos considerados como humedales, que deberían ser protegidos, con el fin de extender la frontera ganadera, para que las tierras continentales puedan ser utilizadas para sembrar soja, principal producción agrícola entrerriana, que ha desplazado a históricos cultivos debido a su extremada rentabilidad.
La provincia está a punto de no alcanzar con su producción de maíz, a satisfacer la demanda de sus propios criaderos de pollos, que son en muchos casos exportados.
Greenpeace Argentina culpa al gobierno entrerriano por los 153 arrendamientos donde se están produciendo los incendios intencionales, en el Departamento Victoria, y señala además, justo en el Día de la Tierra, 22 de abril, que esta tragedia ambiental que perjudica, quizás para siempre, un ecosistema autóctono ultra valioso para el equilibro, tambiín es motivada por la política agropecuaria que aplica el modelo económico desde los 90, y a la voracidad sin límites, ni conciencia del peligro que implica su accionar, del sector privado, que no duda en destruir un hábitat natural como los humedales isleños, en pos de la ganancia fácil y rápida.
La opinión de los ambientalistas , que es apoyada por otras entidades de igual idoneidad, viene a traer claridad sobre un conflicto donde gran parte de la población se queda afuera, y a la que solamente se le permite opinar de acuerdo a sus simpatías políticas por una u otra posición, en relación al conflicto con los propietarios ruralistas, sin poder ver, por la desinformación provocada por los grandes medios, las consecuencias nefastas que tendrá muy pronto nuestro suelo si sigue avanzando el monocultivo de soja, en primer lugar, nuestro privilegio de ser unos de los pocos países del mundo que disfrutan de soberanía alimentaria.

Fuente: infoban.com.ar