Dos delincuentes asaltaron a mano armada una panadería y fueron sorprendidos por un agente penitenciario con el que se tirotearon; uno de ellos terminó detenido junto a un tercer cómplice que había quedado afuera del comercio a la espera de que se concretara el robo.

Fuentes policiales informaron a Tílam que el hecho sucedió esta mañana, cerca de las 7.30, en la panadería situada en Erezcano y Gelpi, cuando los empleados de una panadería descargaban mercaderías y fueron sorprendidos por dos delincuentes que llevaban puestos trajes de trabajo similares a los que usan los barrenderos.

Bajo amenazas con armas, los asaltantes redujeron al dueño del comercio y a tres empleados con fines de robo.

Las fuentes informaron que el asalto fue advertido por un agente del Servicio Penitenciario Bonaerense que trabaja para la red de seguridad del municipio y que ingresó a la panadería con intenciones de frustrar el robo.

Uno de los delincuentes, al verlo, extrajo su arma, por lo que se generó un tiroteo, en medio del cual el ladrón huyó aparentemente herido de un disparo.

El otro, en tanto, fue apresado en el interior del local, donde se halló un revólver que había arrojado detrás de una de las góndolas de mercadería, precisaron los informantes.

En tanto, a unos metros de la panadería asaltada, los efectivos apresaron a un hombre que estaba a bordo de un auto Honda Civic negro, en cuyo interior se hallaron ropas similares a las que vestían los dos ladrones.

Los pesquisas creen que ese detenido fue quien llevó hasta el lugar a los dos asaltantes y esperaba afuera a que se concretara el robo para huir.

En tanto, en un rastrillaje realizado tras el tiroteo, la policía secuestró a metros de la panadería una campera manchada con sangre y una pistola, que aparentemente pertenecían al delincuente que escapó herido y que aún no pudo ser localizado.

El hecho es investigado por personal de la seccional primera de Ituzaingó y de la fiscalía de turno de ese distrito.

Fuente: infoban.com.ar