En la última sesión del año del Concejo Deliberante de Tigre volvieron a aflorar las internas entre el zamorismo y los concejales del massismo. Cuando parecía reinar la calma para que a pesar de estar el oficialismo en minoría se votara el presupuesto por unanimidad, “Gise” la mujer de Zamora al parecer confundió su rol y arrancó a enumerar obras cual intendente en apertura de sesiones, mientras sus pares veían como se demoraba el brindis preparado por el presidente de Concejo, Segundo Cernadas.
Pero la actuación esta vez no fue exclusiva ya que la presidenta del bloque del FdT además empezó a hablar de un supuesto destrato por parte de algunos integrantes de su bloque, ante lo cual su compañero de banca susurró a sus espaldas que tenía la opción de renunciar. La estudiantina de fin de año a la que se subieron varios que callaron verdaderas situaciones de maltratos escaló hasta comunicados cruzados de sectores del PJ.
A la par la esposa del intendente logró una de las denuncias por supuesta violencia de género más rápidamente desestimadas por la justicia, en el distrito que supo hacer punta en esas cuestiones.
Y si así terminaron el 2022 es de esperar que este año electoral se ponga aún más picante, teniendo en cuenta que malena ya avisó que quiere ir por la intendencia, lo cual podría dejar sin lista a Zamora, que abrió el paraguas hace tiempo conformando un partido vecinal para canalizar sus aspiraciones.
