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La empleada doméstica del matrimonio asesinado en el bajo de Vicente López el 25 de agosto pasado fue llamada nuevamente  a indagatoria, volvió a reconocer en los videos de seguridad tomados en el lugar del hecho a Martín del Río, hijo de las víctimas y sospechoso de haber cometido el doble crimen, y aseguró que el buzo que tenía puesto pertenecía a su padre.

Ninfa Aquino se presentó este viernes ante los fiscales Alejandro Musso, Martín Gómez y la fiscal Marcela Semería, y según trascendió, dijo que "le daba asco" lo que hizo Del Río, único acusado por los dos homicidios y lo volvió a reconocer en los videos registrados en las cámaras de seguridad.

Además, la mujer que trabajaba en la casa de Enrique del Río, de 75 años, y de su esposa María Mercedes Alonso, de 72, repitió que es inocente.

Delante de los fiscales y acompañada por su abogado Hugo López Carribero, Aquino aseguró que no tiene ninguna duda de que el hombre que quedó registrado en las cámaras de seguridad llegando a la casa de las víctimas y luego yéndose de la escena del crimen es el único detenido que tiene la causa: Martín del Río.

"Lo reconozco por su forma de caminar que es igual a la de su padre", señaló Aquino, quien además contó que el buzo de color gris que usa el acusado en el video era de su padre.

Al referirse a esa prenda, la mujer dijo: "Lo sé porque lo lavaba todas las semanas, estoy completamente segura".

Unos días atrás, cuando Aquino se enteró que la habían llamado a declarar nuevamente, había dicho ante la prensa: "Los fiscales me llaman a declaración indagatoria nuevamente, junto a mi abogado Hugo López Carribero, para el día viernes 16, a las 10. Ellos quieren que yo colabore con la acusación contra Martín Del Río.

Son los mismos fiscales que pidieron mi detención (y me metieron en un calabozo), que se opusieron a mi libertad y se resisten a mi sobreseimiento. Pero quieren que yo colabore con la Justicia, esto es una infamia".

Martín del Río permanece detenido en la Unidad 48 de San Martín, acusado por el delito de "doble homicidio calificado por alevosía, por el vínculo, por el uso de arma de fuego y por ser criminis causa" (matar para lograr la impunidad), delito que prevé la prisión perpetua como única pena.

Según pudo saber la agencia NA de fuentes judiciales, los fiscales ya reunieron las pruebas suficientes como para poder llevar a juicio al empresario.