El polímico recambio de autoridades del Deliberante de San Isidro, aparte de configurar uno de los actos de crueldad política más grande que se recuerde en la región, mostró por parte de protagonistas secundarios de la cuestión un abanico de bajezas y caradurismo político pocas veces visto.
Por ejemplo el vice del PJ local que aportó la pata Meníndez al supuesto acuerdo de cúpula con Vidal, Massa y Posse, al otro día mientras jugaba en la lista possista del Colegio de Abogados, apareció en la conferencia de prensa del depuesto Castellano con cara de póker y un “me enterí reciín” como única respuesta, luego de que su partido aportara dos ediles para la jugada de “El Cholito”.
Fuente: infoban.com.ar
