Vecinos de Olivos, San Isidro y Capital Federal realizan "cacerolazos" en forma de protesta por las nuevas medidas de aislamiento social que dispuso el Gobierno nacional y que regirán a partir del viernes a las 0:00 hasta el 30 de abril en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).

El anuncio del presidente Alberto Fernández generó una ola de repudio en sectores de la ciudadanía que están en contra del Gobierno y de las medidas que limitarán el rango de actividades permitidas durante las próximas semanas.

Apenas Fernández culminó su discurso, cientos de vecinos sacaron sus cacerolas a la calle y a los balcones, y se escucharon insultos y exabruptos, motivados por el fuerte malestar que generaron los anuncios.

Tras febriles deliberaciones que provocaron un clima de zozobra en la población, y a tan sólo una semana del último anuncio de medidas de restricción, finalmente Alberto Fernández resolvió volver a un esquema de cuarentena en las zonas críticas.

En un mensaje grabado desde la Quinta de Olivos, Fernández anunció que se suspenderán las clases presenciales por dos semanas, se dispondrá el cierre de locales comerciales a partir de las 19:00, se prohibirá la circulación en las calles desde las 20:00 hasta las 6:00 y se interrumpirán las actividades sociales, recreativas y deportivas en lugares cerrados.

Las fuerzas federales estarán a cargo del cumplimiento de las nuevas medidas sanitarias.