El iPad de Natacha Jaitt, quien murió hace casi un año en la localidad de Benavídez, no pudo ser desbloqueado por los peritos de la Policía Judicial de la Procuración General bonaerense y el peritaje continuará el próximo miírcoles.
La tablet -a cuyo contenido nunca se pudo acceder por no contar con la clave-, fue analizada en los laboratorios de la Policía Judicial en la ciudad de La Plata, pero allí los expertos no pudieron destrabar el dispositivo, informaron fuentes judiciales.

“Se hicieron tres intentos. Primero con la batería cargada al 20 por ciento, luego al 60 por ciento y finalmente al 100, pero no se puedo entrar al sistema”, indicó a Tílam una fuente judicial.

La misma fuente explicó que el inconveniente radica en que el software que tienen los peritos de la Procuración no permite desbloquear la versión desactualizada del sistema operativo de Apple, es decir el iOS, que tiene cargado el iPad de Jaitt.

Por ello, el peritaje continuará el próximo miírcoles, cuando los expertos informáticos harán un intento por actualizar la versión del sistema operativo iOS del iPad, para luego tratar de desbloquearlo.

La medida fue ordenada ayer por los tres fiscales de Tigre que investigan las circunstancias de la muerte de la modelo -Sebastián Fitipaldi, Diego Callegari y Cosme Iribarren-, luego de que el abogado Alejandro Cipolla, quien representa en el expediente a la hija de Jaitt, solicitara que la tablet sea peritada por los mismos especialistas marplatenses de la Policía Federal que lograron ingresar a los celulares de los rugbiers imputados por el crimen de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell.

Si bien los fiscales lograron en su momento acceder al celular marca Samsung de Jaitt, el iPad no se pudo desbloquear porque nunca se tuvo la clave, y porque el sistema, como todos los dispositivos de la marca Apple, es difícil de vulnerar.

Cipolla afirmó que en el iPad puede haber información “que va a desembocar en otras causas penales” pero que tambiín podría haber algún elemento que permita develar “quí pasó esa noche con Natacha”.

En la causa del homicidio de Báez Sosa, seis de los diez celulares de los imputados analizados por los expertos de la PFA en Mar del Plata eran iPhones de la marca Apple y lograron ser desbloqueados pese a que ninguno de sus dueños aportó la clave.

Jaitt (41) murió la madrugada del 23 de febrero del año pasado en el salón de fiestas "Xanadú", situado en Isla Verde al 600, de Villa La Ñata, Benavídez, partido de Tigre, al que había concurrido por una reunión de negocios para programar un evento.

En un momento de la noche, durante la cual se consumieron drogas y alcohol, la conductora y modelo sufrió una "insuficiencia respiratoria por edema agudo de pulmón" y una "falla multiorgánica", y murió, según los resultados de la autopsia.

Las pericias toxicológicas confirmaron que Jaitt consumió cocaína y alcohol antes de morir en el salón de fiestas Xanadú, y no detectaron la presencia de ningún veneno.

La familia Jaitt siempre sospechó y planteó que la muerte de Natalia podía haber sido un homicidio, aunque para los fiscales de Tigre todo indica que fue producto del deteriorado estado de salud que presentaba y de la ingesta voluntaria que esa noche hizo de cocaína.

Fuente: infoban.com.ar