El Ministro bonaerense de voz ronca se apareció por San Isidro, pero no para hablar con el intendente, sino para reunirse con los popes del Colegio de Abogados. Cuando bajó del auto en Martín y Omar la “casualidad” hizo que se cruzara con el jefe comunal, que tuvo tiempo suficiente para hacer la lista de necesidades y requerimientos y acercársela antes que despegue el helicóptero. Pero la carpeta habría quedado en segundo lugar ya que desde otro distrito lo primerearon y con mucha seguridad le hicieron los reclamos en persona.

Fuente: infoban.com.ar