Los hijos del dirigente gremial que durante gran parte de su vida dedicó su tiempo a defender los derechos de los trabajadores municipales de Vicente López rinden un sentido homenaje a su figura.El día 19 de Mayo 2006 falleció nuestro querido padre. Un Buen Padre. Un buen hombre. Conocido por todos como Chiche (Foto:al centro con camisa blanca rodeado por sus amigos). El era un hombre duro, leal correcto, jamás se prestó a una traición. El defendió lo suyo, que era siempre estar junto a la gente, a quiín dedicó con toda su vida. Siempre entusiasmado por entregar las rosas, pan dulces, huevos de pascua, de colaborar en los eventos para sus amadas enfermeras, mucamas o festejos de los trabajadores municipales. Tambiín defendió con convicción desde su amado sindicato los derechos de los  trabajadores, peleando orgulloso de salir victorioso en los conflictos que tuvieron que reincorporar a los mídicos jubilados de prepo, como el último aumento logrado, que nos explicaba y repetía veinte veces los 13 puntos. Nosotros como hijos podríamos contar mil historias como peronista de ley, sindicalista, compañero de la gente o simplemente como nuestro padre. Queremos por sobre todas las cosas agradecer profundamente a los que en el peor momento de su vida le tendieron una mano y no lo abandonaron. A las enfermeras y mídicos que lo cuidaron con amor, que hicieron por íl cuanto tuvieron a su alcance; a los amigos de su vida que lo visitaban y en particular al Sindicato de Trabajadores Municipales, su sindicato que le rindió homenaje en vida, cuando en Diciembre se entregaron los relojes a los que cumplieron veinticinco años de servicio y en los últimos días de Febrero se le otorgó un importante presente declarándolo dirigente ilustre del Sindicato ante un acto muy emotivo para mi padre y nosotros que jamás olvidaremos, como tampoco olvidaremos todo el apoyó que recibió en todos los ordenes por parte del sindicato desde el principio de la horrible enfermedad hasta el último aliento de su vida.
Por todo esto y mucho más les damos las gracias a todos, y es nuestro humilde deseo que recuerden a nuestro padre con cariño y como un grande.
Parte de sus restos cremados conforme su voluntad reposarán en la bóveda que el sindicato acaba de terminar y es propiedad el mismo, en el Cementerio de Olivos.
Javier Eduardo Barreiro-Daniel Alejandro Barreiro

Fuente: infoban.com.ar