Un abogado que se encontraba prófugo desde hacía tres meses, tras haber atropellado y matado con su camioneta a un piloto de aviones que circulaba en moto, con el que había tenido una discusión de tránsito en Florida, Vicente López, fue detenido esta mañana durante un allanamiento en una vivienda de la localidad tigrense de Don Torcuato, informaron fuentes policiales.

Se trata de Tomás Mazzini (37), quien fue localizado por efectivos de la SubDDI de Vicente López en una casa de la calle Obligado 925, donde se ocultaba,

Mazzini está acusado del "homicidio simple " (37) de Julián Gustavo Giménez (28), a quien embistió con su camioneta Jeep Renegade negra tras una discusión de tránsito cuando la víctima circulaba en moto por San Martín y Remedios de Escalada, de Florida, partido de Vicente López, el 4 de agosto último.

Todo comenzó cuando Giménez iba a bordo de su moto marca Motomel y fue embestido por el rodado del abogado Mazzini, patente AD941LW.

Las cámaras del municipio captaron el momento en el que la víctima le dio un golpe de puño al espejo izquierdo de la camioneta mientras cruzaban las vías del ferrocarril y el instante en el que el conductor de ese rodado aceleró y cambió bruscamente de carril para impactarlo.

El piloto de aviones quedó herido debajo de la Jeep y sobre la vereda y murió 20 días después en la sala de terapia intensiva de la Clínica Olivos, mientras que el acusado escapó.

El fiscal Martín Gómez, de la Unidad Funcional de Instrucción de Vicente López Este, que ya había pedido la detención del abogado por "homicidio simple en grado de tentativa" en base a los videos del hecho, recaratuló la causa como "homicidio simple" al considerar que Mazzini embistió y atropelló de manera deliberada a Giménez.

La defensa del acusado presentó una eximición de prisión, que fue rechazada tanto por el juez de Garantías 4 de San Isidro, Esteban Rossignoli, y por la Sala III de la Cámara de Apelaciones de ese departamento judicial.

Mazzini permaneció hasta hoy prófugo, con pedido de captura y el Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires ofrecía una recompensa de entre dos y cuatro millones de pesos para quienes aportaran datos que permitieran ubicarlo.