Ph: Gentileza

Mientras el gobierno nacional intenta ver cómo limitar el poder de los movimientos sociales, el Pro no tuvo mejor idea en provincia y en la Ciudad que armar uno propio.

En territorio porteño pudieron instalarse con un presupuesto millonario en asistencia social del gobierno de Horacio Rodriguez Larreta, mientras que en la provincia los intendentes no quieren cederle el espacio a los movimientos sociales ligados al gobierno, que según los alcaldes amarillos aprovechan obras y programas municipales para llevar votos a las listas del Frente de Todos.

“Vamos a competir también en el terreno de ellos para que no tengan tiempo a venir a captar el voto de la clase media” avisa un intendente del conurbano que ya supo entre una PASO y una general dar vuelta una elección por  11 puntos.